Adrián Baigorria
El jazz argentino sigue exhibiendo una escena prolífica y creativa. Así lo prueban dos excelentes lanzamientos recientes: ‘Escenarios’, el debut discográfico del pianista Javier Burin y ‘Su trazo y el silencio’, el disco del dúo integrado por el contrabajista Nicolás Ojeda y el pianista Germán Lema. Estos autores pertenecen a la inquieta y renovada escena del jazz porteño.
‘Su trazo y el silencio’. El nombre introspectivo del disco es una dedicatoria al padre fallecido de Nicolás Ojeda, quien era artista plástico. Este cuarto disco del contrabajista fue grabado en septiembre de 2022 en el estudio Doctor F de Buenos Aires y editado ahora por el sello ears&eyes records. El contrabajista es cordobés pero se fue a vivir con su padre a General Roca (Río Negro), a principios de los años ’90. Allí recibió clases de un notable compositor de jazz rionegrino: el contrabajista Andrés Fuhr. Después partió a Buenos Aires donde se siguió formando, entre otros con Guillermo Vadalá, e inició su carrera en el jazz, en la que ya lleva cuatro discos grabados con música original.
En 2022 Nicolás Ojeda tuvo una de las experiencias existenciales que más pueden marcar a una persona: perdió a su padre. Antes de eso, el contrabajista junto al pianista Germán Lema le habían dedicado la grabación de una exquisita versión del clásico ‘The peacocks’, bella e intimista composición del pianista Jimmy Rowles, registrada en 1975, de la que es reconocida la deliciosa versión del mítico trío del pianista Bill Evans, en 1977. La sutil y dedicada grabación se constituyó en un especialísimo regalo del día del padre. Dos meses después, el artista plástico que había impulsado y sostenido el afán musical de su hijo por el jazz y por el contrabajo partía definitivamente.
A partir de ahí, entre ambos decidieron impulsar una especie de trío muy peculiar sostenido por el piano, el contrabajo y el silencio. La escucha del material atravesado por un clima intimista e introspectivo permite detectar que, efectivamente, el silencio juega lo suyo en una música que es una exquisitez por la estatura compositiva de lo gestado entre ellos y por la atmósfera creada con sólo dos instrumentos.
Hay un aire de apacible melancolía que recorre el grueso del material. Entre las composiciones, se destacan ‘La búsqueda’, ‘Bocetos’ y ‘Apuesta en Buenos Aires’. Además de la versión de ‘The peacocks’, el material cierra con otra dedicatoria especial: ‘TQP’ (para Papá).
Debut discográfico de Javier Burin. El joven pianista y compositor Javier Burin lanzó hace poco ‘Escenarios’, un impecable y sólido debut en el que reúne obras propias y otras ajenas de compositores emblemáticos del género como John Coltrane o Cole Porter, con un abordaje original. El trabajo muestra una notable madurez artística y la solidez típica de la formación piano trío, cuando los músicos trabajan muy bien el lenguaje jazz y dialogan musicalmente con fluidez entre ellos. Javier viene recorriendo importantes escenarios de la escena del jazz argentino y ha recibido grandes elogios de músicos consagrados del género, como el baterista Daniel ‘Pipi’ Piazzolla, el trompetista Juan Cruz De Urquiza y el contrabajista Hernán Jacinto, entre otros.
‘Escenarios’ es un registro en formato piano trío junto a Juan Cava, en batería y Esteban Freytes, en bajo eléctrico y contrabajo. El material integra ocho obras instrumentales, tres composiciones propias, cuatro standards, con arreglos originales, y una obra especial (“Intersticio”), compuesta por el contrabajista Esteban Freytes. El disco fue grabado en los estudios Doctor F, en diciembre pasado en Buenos Aires, y fue editado este año por el sello ‘Los años luz’.
Respecto del trabajo, Javier Burin dice: “Escenarios es el resultado de mi incursión en el mundo jazzístico que comenzó en 2019, como arreglador y compositor. La música
-que para mí es un gran medio para expresarme y probar diferentes elementos rítmicos, armónicos y melódicos- la fui escribiendo poco a poco a lo largo de los últimos años; la interpreté con diferentes grupos y formaciones hasta llegar a esta formación de trío que me acompaña y le supo dar vida a mis ideas de una manera aún mejor de la que imaginaba. Este primer álbum está inspirado en mis ídolos de la música: Bach, Keith Jarrett y Jeff Watts, entre otros”.
Respecto del material, Burin manifiesta que “el nombre del álbum surgió a partir de imaginar los temas que componen el disco como distintos escenarios musicales para que el trío explore con la improvisación. Esta búsqueda artística sucede tanto con los standards como en mis propias composiciones”.
Y luego agrega: “En los standards, imagino una versión alternativa de un tema de Coltrane (Moment’s Notice) o de Cole Porter (Night & Night), en la que la armonía cambia, e incluso la cantidad de tiempos por compás o la forma del tema son distintos a los originales, convirtiéndolos así en un lado B de un tema que todos conocemos”.
En cambio, “en mis propias composiciones, se evoca una imagen polaca, melancólica y dramática (en PF) o un retrato navideño, más cálido, pero también vertiginoso (en Navidad). Son justamente esos escenarios los que le dan vida al disco”, completa el pianista.