El mundo del jazz local puede ser visto en ocasiones como una curiosa cofradía o hermandad, en la cual de un modo u otro todos se conocen y más tarde, en función de sus afinidades musicales y simpatías, terminan tocando juntos. Fue lo que sucedió con estos tres notables músicos, el saxofonista Sebastián Mazzalupo, el baterista Ernesto Zeppa y el contrabajista Nicolás Ojeda. Y fue realmente un gusto verlos y escucharlos compartiendo un mismo escenario, sumando sus muy ponderables talentos. El ensamble tiene una musicalidad destacable y un sonido bien cohesionado, que por momentos genera un efecto que nos animamos a calificar de hipnótico: resulta muy sencillo perderse en las evoluciones de las notas, y cuando alguna pieza llega a su fin nos damos cuenta de que hemos sido trasladados a otra parte.
Las composiciones, responsabilidad repartida entre los integrantes del grupo, no se inscriben necesariamente en el free jazz, pero plantean una libertad que es a todas luces exploratoria, permitiéndose abordar por momentos el terreno de la melodía, de a ratos lo rítmico y en otros casos la pura sonoridad del ensamble. Hubo también una versión de un tema de Keith Jarrett, pero más allá de la identificación puntual que puedan tener o no las piezas, la sensación que queda en el oyente, una vez terminado el recital, es la de haber sido testigo de un feliz proceso de búsqueda, que abreva en dimensiones primitivas, quizás hasta rituales o místicas. Como cuando dos músicos se interpelan en inglés para decirse: let’s play some music. Y en el fondo no se trata de otra cosa más que de un juego, aunque probablemente sea de carácter sagrado.
Antes del trío, también actuó como invitada la pianista Bárbara Legato, quien presentó varias composiciones propias, haciendo foco en una sencillez y un melodismo que contrastó adecuadamente con lo que vendría después. Habrá que estar atentos al rumbo que tome esta artista. En cuanto al trío de Zeppa, Mazzalupo y Ojeda, es de esperar que pronto plasmen su trabajo en un registro discográfico, para que quede un testimonio definitivo. Mientras tanto no lo dude: si le gusta el jazz centrado en el eje de la exploración y tiene oportunidad de escucharlos en vivo, acérquese. Germán A. Serain
Fue el 4 de agosto de 2017
Borges 1975
Borges 1975 – Cap.
(011) 3973-3624